Este aspecto presentaba un balcón del hotel Pedro I el once de agosto de 2008. Por cierto que la foto la hizo Jan, sin duda sorprendido por el color local y con la certeza de que es normal ver trajes de torero aireándose en los balcones de la ciudad...
Por su parte, el torero... bueno, se me ocurren dos hipótesis:
-que se trate de un banderillero de tres al cuarto en su primera salida del pueblo, en plan “Paquito de Fuentecolillas”, y el hombre sientiera la necesidad de exponer sus galas para regocijo de los viandantes.
-que el torero, todavía en traje de luces, se pillara la noche anterior el colocón de su vida, animado por la marcha oscense y acabara gritando: “Es cheposo el que no vote, eh eh!”; y el pobre sólo estuviera dejando ventilar el traje durante la hora escasa antes de la siguiente corrida...
Se aceptan sugerencias.
2 comentarios:
firmado: Clavelina Innopius
¡¡Ehh!!! ¡¡yo estaba ese dia!! ¡¡Me acuerdo de ver a Jan haciendo la foto!!! Yo me inclino más por la teoría número uno, pero... propongo una teoría alternativa: quizá el supuesto Torero no lo era tal, y estaba compinchado con un grupo de narcotraficantes para que le pasaran la mercancía cuando el hiciera la señal... "Dejar el traje de Torero en el balcón." ¡¡Muchos besos!!
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